El Frente Gremial de Abogados "Colegio Para Todos" realizó un acto de campaña en la Unión e Benevolenza del centro porteño para presentar a los candidatos y las propuestas de la lista 59, a menos de una semana de las elecciones que renovarán las autoridades del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal.
Los oradores fueron el secretario de Justicia de la Nación, Julián Álvarez; el integrante de la Mesa de Conducción Nacional de La Cámpora, Mariano Recalde; el Ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, y el candidato a presidente del entramado kirchnerista, Damián Loreti, un prestigioso abogado que se ha doctorado en Ciencias de la Información y que es el autor, entre otros, de la letra de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
El 24 de abril será la primera vez en la historia del Colegio Público de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires que una fuerza política que se define como nacional, popular, democrática y latinoamericana disputará los cargos electivos que se ponen en juego cada dos años. Las organizaciones que componen el Frente son, entre otras, La Cámpora, Pueblo Peronista, Cabildo Abierto de la Militancia, la agrupación "Arturo Sampay", Komunidades, Frente de Unidad Peronista, Asambleístas, la Corriente Nacional de Graduados "Tala Ventura", la agrupación "Rodolfo Ortega Peña", la corriente de Abogados Porteña y la Asociación de Abogados Laboralistas.
Julián Álvarez afirmó que "a pesar de las profundas transformaciones de los últimos ocho años, todavía falta luchar por las instituciones intermedias como el Colegio Público de Abogados, que en la reforma del código civil y comercial defiende los intereses de los bancos y no lo de nuestro pueblo", y que "como Generación del Bicentenario tenemos que construir un proyecto político para los próximos cien años de nuestra patria".
Los locutores leyeron decenas las adhesiones que habían hecho llegar varios diputados nacionales, organizaciones políticas, sociales y culturales, asociaciones de profesionales de todo el país, sindicatos, y hasta una carta del vice gobernador de la provincia de Buenos Aires, Gabriel Mariotto.
"Quién dice que no se puede ganar el Colegio de Abogados de la Capital Federal", preguntó Mariano Recalde al tomar la palabra. "Deben ser los mismos que le decían que no se podía sacar a la Corte adicta", o "los que le decían a Loreti que no podría promulgar una ley de medios de la democracia", o "los mismos que le decían a Carlos Tomada que era imposible revertir el proceso de flexibilización laboral o construir un país con paritarias", o "los mismos que decían que era imposible recuperar YPF". "A todos esos", remarcó, "les decimos que vamos a ganar el Colegio, en esta elección, la que venga o la que siga, porque ver a tantos abogados comprometidos con el Pueblo y con la causa nacional y popular, unidos y organizados, como nos pide nuestra Presidenta, ya es haberle ganado a la derecha y al neoliberalismo".
Carlos Tomada dijo que no había venido a hablar como abogado, ni ministro, sino como militante. "Celebremos que se haya conformado un Frente de Abogados, ya que da cuenta de una convergencia de sectores del kirchnerismo y otros sectores políticas con otras identidades pero que levantan las banderas del proyecto nacional", sostuvo. "Tal cual dijo Cristina en el acto de Huracán del año pasado", recordó, "en estos momentos tiempos de construcción, no hay que caer en el sectarismo, preguntándole al otro de dónde viene, sino si cree en la educación pública, o en la asignación por hijo como piso de protección social, o en los principios de memoria, verdad y justicia", y otros de los logros de los últimos años. "Si creemos en todo eso", cerró, "estamos trabajando por los mismos objetivos". El ministro contó que tuvo el privilegio de trabajar junto a Loreti en distintas oportunidades, y que su formación y coherencia hablan de la calidad de los cuadros políticos que impulsa el Frente.
El candidato a presidente de la lista, Damián Loreti, preguntó "hace cuánto tiempo que el Colegio Público, que involucra a los otros dos candidatos que ya presidieron la institución, no se dedica a pensar cuál es el rol del Derecho en la sociedad argentina". "Nos hicieron creer que el único abogado es que litiga contra el Estado, jamás pensándolo en un paradigma de éxito que no fuese el de defender a los poderosos. ¿Dónde dice que no hay un paradigma de éxito para el abogado comprometido con la defensa de las causas de los más desfavorecidos, o del Estado frente a los grandes estudios jurídicos?". En relación a los contrincantes de los comicios, dijo que "se enorgullecen de haber favorecido la presentación de miles de amparos por el corralito, pero hubiera sido mejor que nunca hubiéramos tenido que llegar al corralito, al megacanje, a hacer juicios por la reducción del 13% de las jubilaciones".
"Queremos que el Colegio tome la voz pública para mejorar las condiciones del conocimiento de las reglas jurídicas institucionales del país", afirmó Loreti, "haciendo educación jurídica comunitaria para que el pueblo argentino se entere de qué se tratan las leyes que aprueba el congreso nacional". "En materia de cursos lo único que tenemos es una pegatina de calcos de universidades privadas. Preocupa la falta de alianzas del Colegio con universidades públicas, organizaciones de derechos humanos, sociales y sindicales, o redes de defensores. Nos estamos mirando el ombligo, y es necesario transformar al colegio en una herramienta que forme parte de un proyecto de democracia sustantiva", cerró.
El Frente Gremial de Abogados se llama así en reconocimiento a los hombres y mujeres que crearon la "Gremial de Abogados", durante las décadas 60 y 70, para defender a los presos políticos de aquellos años. Y en ese sentido, Loreti dijo que el Colegio debería habilitar un ateneo de estudio que tenga que ver con la memoria de los colegas que fueron desaparecidos por la última dictadura cívico-militar". Para cerrar el acto, Loreti homenajeó a "su maestro", Mario Landaburu, secretario de aquella Gremial, que en agosto de 1972, en la Federación de Box, dio un discurso memorable, y convocó a construir un Colegio que "no esté al servicio de las corporaciones, sino a merced de la construcción de un modelo de profesional que se comprometa con las necesidades de su pueblo. Un profesional que reconozca su lugar como sujeto político".
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