DE LA AGENCIA PERIODÍSTICA DEL MERCOSUR: "Medios e (in) comunicación". La bonanza económica, un silencio. Las empresas periodísticas especializadas y las que cubren temas de interés general, pertenecientes a los grandes grupos oligopólicos, desestiman en forma sistemática las noticias económicas positivas de Argentina, quitándolas de los títulos y alojándolas en espacios de menor visibilidad. ///////////

Economía y Política

Existe una una notable escasez de noticias que den cuenta de la buena performance Argentina
Montaje APM

Por Pablo Campos y Hugo Vásquez | Desde la Redacción de APM

 

Todos están de acuerdo, tanto el sector público que mide la actividad económica a través del INDEC como los consultores privados, en que el primer semestre del año 2010 ya superó todos los pronósticos, aún los mas optimistas, en relación al desempeño de la macroeconomía argentina.

El mayor dinamismo del consumo en el mercado interno, producto de la incorporación de amplios sectores de la población a través de políticas de ingreso universal y la recuperación de los salarios formales, el sostenimiento de un tipo de cambio competitivo mediante la intervención del Banco Central en el mercado cambiario, la solidez del sector bancario y financiero local en un contexto de fuerte volatilidad mundial, el buen desempeño de la producción industrial y agropecuaria, y el sostenimiento de una performance exportadora superavitaria son algunos de los factores que explican el retorno al sendero de crecimiento del producto.

Sin embargo, un análisis de los titulares de los matutinos de Buenos Aries y de sus respectivos soportes digitales, arroja una notable escasez de noticias que den cuenta de la buena performance de Argentina en materia económica, en los primeros meses del año.

En relación a esto, Arnaldo Bocco, miembro del directorio del Banco Central, realizó dijo que la economía argentina “esta mejor de lo que la sociedad imagina”. Sin embargo, se aprecia una curiosa falta de interés por parte de los grandes grupos de comunicación en la publicación de noticias económicas, cuando las mismas resultan positivas para la actual gestión de gobierno.

Lo cierto es que, en la actualidad, Argentina alcanzó niveles de producción similares a los vigentes antes de la crisis financiera internacional, y mientras los detractores del modelo lo llaman “rebote técnico desde la desaceleración del 2009”, quienes sostienen la defensa del actual modelo económico argumentan que se ha vuelto al sendero natural de crecimiento para una economía como la argentina, en la que sus principales pilares gozan de buena salud.

En la última semana, la publicación del Estimador Mensual de Actividad Económica, que elabora el Instituto estatal de estadísticas (INDEC), muestra, para el pasado mayo, un crecimiento de la economía superior al 12 por ciento, en relación a igual período del 2009. La industria creció en torno al 10 por ciento, siendo la producción automotriz la de mayor dinamismo dentro del sector, con un crecimiento interanual del 47 por ciento.
También crecen la construcción y el sector agropecuario, con una cosecha que se será record, influyendo en forma positiva sobre los subsectores proveedores de insumos tales como el caucho, el acero crudo, y el cemento, entre otros.

Estos valores permiten obtener un crecimiento promedio en el orden del 8 por ciento para los primeros cinco meses de 2010, allanando el camino para que Argentina finalice el año con un crecimiento en el orden del 6 o 7 por ciento, situación que superará todas las expectativas incluso en la región, a excepción de Brasil, con un crecimiento esperado del 8 por ciento.

En materia financiera la Argentina cuenta con "mucha holgadez", aseguró el economista Eduardo Setti, al destacar el "sistema virtuoso que genera superávit fiscal en balanza de pagos".

En ese sentido, Setti estimó que este año "el gobierno no va a generar mayor endeudamiento, mientras que sí habrá refinanciamiento de la deuda existente".
Además, agregó que "con el proceso de crecimiento tan fuerte, la deuda va perdiendo peso en términos relativos", por lo que tendería a bajar este año con un avance del Producto Interno Bruto (PIB) de entre 6 y 8 por ciento.

Asimismo, Orlando Ferreres destacó la "holgadez" de las cuentas públicas, y subrayó que "el endeudamiento está bastante mejor", al tiempo que estimó que "seguramente la deuda pública va a bajar" este año.

También Miguel Kiguel descartó problemas financieros para este año y el próximo, mientras que consideró que "para 2011, el gran desafío es poder volver a los mercados y financiar parte de la deuda con dinero fresco, no solamente utilizando reservas".

El martes pasado, el gobierno anunció que el superávit fiscal en junio superó los 2.700 millones de pesos, y las cuentas públicas del primer semestre del año cerraron con una ganancia de 11.072,2 millones de pesos, un 54 por ciento más que las del período enero-junio del año pasado.

"Independiente del cúmulo fiscal de ahora, el problema del financiamiento para este año ya estaba resuelto una vez que se decidió utilizar las reservas", dijo Kiguel.
En ese sentido, aseguró que el panorama es "muy tranquilo" y sostuvo: "no veo problemas financieros para este año; y el año que viene no creo que sea el centro del problema económico".

Ferreres recordó que luego de la devaluación, la relación deuda/PIB "pasó a ser 140 por ciento" y ahora está en torno del 40 por ciento. "Para que la cosa ande bien, no puede pasar de 25 por ciento del producto", apuntó.

Por otra parte, consideró que el consumo, uno de los pilares del superávit fiscal, "va a continuar por un tiempo", aunque podría comenzar a reducirse en un promedio de "seis meses a un año", por la acumulación de cuotas.

En tanto, para Kiguel "el consumo viene fuerte, pero el crédito a largo plazo no va a ser fácil de sostener en la medida que siga la inflación. Por el segundo semestre de este año va a seguir habiendo crédito", estimó.

En cambio, Setti consideró que "el financiamiento se está manteniendo, parece ser un fenómeno que vino para quedarse", además "los salarios están recuperando valor año a año", concluyó.

Lo notable entonces es que, a pesar de que muchas consultoras privadas e incluso algunas con una visión claramente ortodoxa, reconocen en sus informes la buena performance de los indicadores macro, que las reservas superan los 50.500 millones y que el vigoroso superávit comercial este año otra vez arrojará cifras en el orden de los 16.000 millones de dólares excedentes; lo notable es, decíamos, que la prensa oligopólica local muestra poco interés por informar al respecto, y todo porque ya no sabe cómo oponerse al gobierno de la presidenta Cristina Fernández.